miércoles, 20 de abril de 2011

Pero el primer amor nunca se olvida.

¿Por qué le quiero? ¿Por qué no dejo de pensar en él? ¿Por qué le necesito a cada momento del día? ¿Por qué se me acelera el corazón cada vez que se conecta? ¿Por qué no puedo dejar de mirarle? ¿Por qué amo cada uno de sus gestos? ¿Por qué cuando me sonríe, me vuelve loca? ¿Por qué nunca puedo dejar de hablar de él? Bueno, a ciencia exacta no lo sé, algunos le llaman estar enamorado, otros le llaman estar obsesionado.